Hoy voy a contarles sobre nuestra visita a un hospital para tortugas, si si, así como suena, un hospital para tortugas marinas (y de agua dulce) que lo tiene todo, desde salita de primeros auxilios hasta un tomógrafo y sala de rayos X.
Poco sabíamos antes de empezar nuestro roadtrip por la costa Este de los EEUU que existía un lugar llamado Brunswick, mucho menos que había una zona que se la conoce como Georgia Golden Isles, o en español las Islas Doradas de Georgia, y ni imaginábamos que ahí existía una isla con el nombre de Jeykll Island.
Cómo terminamos ahí? La historia se remonta hasta mi infancia 🙂 ja ja.. Todos tenemos a una tía que vive lejos y que en realidad no es tía si no que es la prima de algunos de nuestros padres y que a sus hijos los llamamos primos y que nos criamos juntos en la casa de nuestros abuelos y bisabuelos (en Cañada Rica, provincia de Santa Fe, Argentina) hasta que la vida de adultos nos termina separando.
Bueno, ése “primo mío” se llama Javier Gamboa y es incluso más viajero que yo, en Costa Rica se casó con una americana que lo trasladó a España por su trabajo de bióloga marina y que luego de unas vueltas por Australia ahora tiene residencia en Brunswick. Allí vive con sus dos hijas y su esposa Katie Higgins que es justo la directora del Centro de Tortugas Marinas de Georgia y más o menos así cierra toda ésta historia, cuando el vió en nuestro Facebook que pasaríamos cerca de su casa nos intimó a que los visitemos.
“La vida es un conjunto de sucesos encadenados, sólo hay que salir a buscar los eslabones.”
– Che Toba, Contemporáneo 🙂
Por qué un hospital para tortugas?
Existen en el mundo muchas reservas naturales o parques nacionales para la protección de las tortugas marinas.
También hay muchos centros de rehabilitación en la costa de diferentes países, pero un hospital tan completo como éste no, nos cuentan que es uno de los únicos en el mundo.
Aclaración tipo pedido: Evitemos comentarios del tipo “que en tal o cual hospital faltan aparatos para atender a las personas y que aquí se gasta platas para las tortugas”, si bien es injusto que éstas cosas pasen en el mundo éste blog no es espacio para ése reclamo, el Centro de Tortugas de Georgia es una fundación que trabaja duro para reparar un daño que el mismo hombre le ocasiona a éstos animales y al medio ambiente, por lo que es válido que exista y no pretendo con ésto abrir un debate ni discusión, éste artículo es simplemente para compartir la obra del lugar y nuestra experiencia de un viaje en familia.
El daño: Resulta que las principales ciudades de la costa este de los EEUU están unidas por una importante autopista, la AU 95. Ésta autopista, como así también otras rutas y caminos, cruza por una zona natural que por siglos fue refugio y hábitat de muchas especies de animales, reptiles y zona de reproducción de al menos 4 especies de tortugas marinas. Esta autopista genera accidentes de tránsito con las tortugas por más que se hagan muchos esfuerzos por evitarlos y se hayan creado viaductos para que las mismas se desplacen.
También a causa de las autopistas, rutas y puentes, ésta zona natural se convirtió en un atractivo para el negocio inmobiliario, se vivió un fuerte desarrollo urbano y mucha gente se mudó a éstas áreas que antes pertenecían a las especies silvestres. Hoy la mayoría de las tortugas internadas están siendo tratadas por accidentes de tránsito y por ataques de perros grandes cuando cruzan por jardines de grandes casas que son casi verdaderas mansiones.
El hospital de tortugas de Georgia
El hospital recibe algo de ayuda de parte del gobierno (por su responsabilidad con las autopistas) pero principalmente se sustenta por donaciones y cuotas de vecinos del lugar, alguna que otra ONG y un poquito por los turistas que llegan a la zona (hermosa por cierto) y visitan el lugar, abonan una entrada opcional para hacer algunos de los recorridos ofrecidos y/o compran algún souvenir en el lugar.
El Georgia Sea Turtle Center también es una pequeña ciudad universitaria con unos pocos estudiantes de todo el mundo que vienen a realizar pasantías rentadas o de voluntariado para sus carreras de biología marina.
El lugar cuenta con dos tipos de visita, una libre y gratuita y otra guiada. Las visitas guiadas tienen un costo a partir de los u$s 5 por persona y el precio varía en función de la edad del visitante y de lo mucho o poco que se quiera interactuar en el hospital.
La zona de tienda de souvernir es gratuita, también es gratis el salón continuo a la tienda que a través de pantallas interactivas y pizarras nos enseñan acerca de las diferentes etapas en la vida de una tortuga marina, los peligros y los desafíos naturales que debe enfrentar una pequeña cría para llegar a ser adulta, como así también los peligros de la vida en convivencia con nosotros, “los humanos”.
También desde una ventana se puede ver parte del hospital y a su personal trabajando.
Si uno desea pagar para colaborar con una entrada especial, la visita guiada lo lleva a ver los diferentes estanques y áreas donde las tortugas están “internadas”, generalmente con golpes, fracturas por accidentes de carro o mutilaciones producidas por ataques y mordeduras de perros o tiburones.
En las piletas podemos ver que las tortugas son numeradas y cada una tiene una ficha visible al público con nombre, foto de cuando llegó, fecha, diagnóstico y todo sobre su tratamiento.
Las personas que quieran colaborar un poco más pueden adoptarlas como ahijadas, a través de pequeños débitos pactados de una tarjeta de crédito puede apadrinar su tratamiento y el día que sea dada de alta se le avisa al padrino que su donación ha sido la oportunidad que su tortuga necesitaba para sobrevivir.
Por el precio de una entrada mayor es posible pasar al “detrás de escena” y recorrer las diferentes áreas del hospital, siempre con un guía para ver de cerca como trabajan los biólogos, los ayudantes, conocer la sala de cirugía, la sala de rayos X, la cocina dónde se prepara la dieta especial para cada tortuga según especie y dolencia, etc, etc. (Visita recomendada)
En el siguiente video podemos apreciar un poco más de cómo es el lugar y cómo se trabaja, creo que el video transmite mucho más que todas mis palabras y mis fotos.
Al finalizar el recorrido sugiero comprar algún presente de recuerdo y así ayudar a que éste lugar siga trabajando y ayudando a que éstos animales sigan poblando las costas de nuestro planeta.
I Brake for Turtles – Yo freno por las tortugas – Calco para la parte trasera del vehículo
Para más información sobre el lugar, días, horarios y precios, puede visitar al web oficial del Georgia Sea Turtle Center.
Si tiene ganas de planificar una visita a Brunswick (no es taaaan lejos de las playas del norte del estado de la Florida) puede acceder a la oficina de turismo virtual en la web de Brunswick Experience. Si le sobran unos cuántos dólares también es posible que quiera invertir en alguna de las “simples propiedades” de las Golden Isles :-). Los tres sitios mencionados están en inglés 🙁
Gracias primo por recibirnos después de más de 25 años sin vernos, gracias Katie por la visita guiada que fue todo un lujo para nosotros, un saludo a las nenas y disfruten del cambio de vida, sé que extrañan a la familia local pero qué sería de la vida sin un movimiento constante y nuevas experiencias. Los queremos, los CheToba.
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1 Comentario
Muy interesante el comentario, es gratificante el conocer gente que ame los animalitos indefensos al punto de instalar un hospital tan completo como el que muestras. ME ENCANTÓ LA NOTA. FELICITACIONES !!!!!!