El Museo de la PACHAMAMA se encuentra en la localidad de AMAICHA DEL VALLE, en la provincia de Tucumán, Argentina.
Este hermoso espacio museo y galería de arte al aire libre, está ubicado cerca de la rotonda de ingreso al pueblo en el KM 118 de la ruta provincial 307.
Si bien el valor de la entrada es un poco alto, sobre todo si se viaja en familia, su visita vale la pena porque todo el predio es una obra escultural del artista plástico (y polémico) Héctor Cruz.
El lugar es un museo de arte, un estilo precolombino basado en la historia e investigaciones del artista sobre la cultura de los Diaguitas, conocidos también como Los Quilmes, e Incas que habitaron los Valles Calchaquíes.
Además de las grandes esculturas se aprecia un mini museo de geología, minimuseo pero completo de antropología y un centro de exposiciones de tapices, pinturas y otras esculturas menores del artista.
La ambientación del predio es todo un culto o una representación de la PACHAMAMA a través de símbolos, imágenes rupestres y esculturas en piedra y cuarzo.
Cada rincón del lugar está decorado y tiene grabadas figuras precolombinas, cactus, mosaicos, cerámica, realmente es una obra de arte creada dentro de otra otra obra de arte.
Las diferentes y estratégicas áreas de descanso hacen que el visitante interactúe con la obra y como si fuera poco, rodeado de un paisaje brillante donde todo brilla y resplandece, desde los cerros hasta un cielo azul de lo más puro y limpio.
La historia del artista sorprende por su trayectoria y su obra majestuosa, pero contrasta lamentablemente con la relación que tiene con los nativos, con los pueblos originarios de las tierras debido a una concesión que éste obtuvo durante el Gobierno de Ramón Ortega para construir un Hotel dentro del predio de LAS RUINAS DE QUILMES.
Hoy existen varios juicios de desalojo a nativos y de éstos, al artista, por la construcción del hotel sobre lugares sagrados.
Los locales también denuncian la compra de tierras a la provincia, que en realidad son de los originarios a valores ridículos, lo que abrió varias investigaciones y juicios aún vigentes y por todo ésto de alguna manera se mancha el nombre del artista.
De regreso a mi escritorio, y sin pretender saber quién tiene la razón, porque no es ni mi tema ni tengo pruebas, encontré en internet a través de varias páginas que realmente existe el problema y el conflicto es paradójicamente contra quienes inspiraron su arte, o al menos sus descendientes.
En fin, otra cosa más que nunca voy a entender de nuestra Argentina Sorprendente
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1 Comentario
Bellisimas fotos!!!!!!son efectivamente unas obras de arte con muy marcado buen gusto y armonìa de lìneas y colores.
Gracias Toba por permitirme admirarlas !!!!!